Descripción: Esta receta es un homenaje a la diversidad culinaria del planeta, fusionando elementos de diferentes culturas en un solo plato que promete ser una experiencia sensorial única.

Ingredientes:

• 1 taza de quinua
• 1 taza de arroz integral
• 250 g de tofu
• 3 cucharadas de salsa de sésamo
• 1 cucharada de jengibre rallado
• 1 taza de brócoli, cortado en pequeños ramilletes
• 1 zanahoria, en rodajas
• 1 pimiento, en tiras (puede ser rojo, amarillo o verde)
• 1 mango maduro, pelado y cortado en cubos
• 1/4 de taza de cilantro fresco, picado
• Jugo de 1 limón
• 1 cucharadita de miel
• 1 aguacate, en rodajas
• 1/4 de taza de almendras, tostadas
• 1/4 de taza de nueces, tostadas
• Semillas de chía para decorar

Procedimiento:

1. Comienza cocinando la quinua y el arroz integral. Enjuaga ambos granos con agua fría. En una olla, agrega 2 tazas de agua y lleva a ebullición. Añade la quinua y el arroz, reduce el fuego y cocina a fuego lento durante 20-25 minutos, o hasta que estén tiernos. Escurre y reserva.
2. Mientras se cocinan los granos, prepara el tofu. Corta el tofu en cubos y marínalo en la salsa de sésamo y el jengibre rallado durante 30 minutos.
3. En un sartén grande o wok, calienta un chorrito de aceite a fuego medio-alto. Agrega el tofu marinado y cocínalo hasta que esté dorado por todos lados. Retira y reserva.
4. En el mismo sartén, añade las verduras: brócoli, zanahoria y pimiento. Saltea durante unos 5-7 minutos hasta que estén crujientes pero tiernas.
5. Prepara la salsa de mango: en un tazón, mezcla los cubos de mango, el cilantro picado, el jugo de limón y la miel. Tritura con un tenedor hasta obtener una salsa chunky.
6. Para montar el bowl, coloca una base de quinua y arroz en el fondo. Agrega el tofu dorado y las verduras salteadas. Añade las rodajas de aguacate y rocía generosamente con la salsa de mango.
7. Decora con las almendras y nueces tostadas, y espolvorea semillas de chía por encima.

Recomendaciones de Presentación:

Sirve el bowl en un colorido bowl de cerámica, añadiendo una ramita de cilantro fresco y unas rodajas de limón al lado. Esto no solo embellece el plato, sino que también brinda un toque fresco en cada bocado.

Experiencia Gourmet:

Este bowl no solo es visualmente atractivo, sino que también ofrece una explosión de sabores y texturas que transportan a los comensales a un viaje culinario por todo el mundo. Al degustar, cada bocado es una celebración de la diversidad y la creatividad en la cocina.