Origen: Este delicioso plato proviene de la fusión de la cocina italiana con ingredientes autóctonos de América del Sur, específicamente la quinua, un superalimento originario de los Andes.

Ingredientes:

• Para la masa de ravioles:
• 2 tazas de harina de trigo
• 2 huevos
• 1 cucharada de aceite de oliva
• Una pizca de sal
• Para el relleno:
• 1 taza de quinua cocida
• 1 taza de setas silvestres
• 1 diente de ajo picado
• 2 cucharadas de cebollín picado
• Sal y pimienta al gusto
• Para la salsa de trufas:
• 1 taza de crema de leche
• 2 cucharadas de aceite de trufa
• Sal y pimienta al gusto

Procedimiento:

1. Preparar la masa: En un bol grande, mezcla la harina y la sal. Haz un hueco en el centro y añade los huevos y el aceite de oliva. Mezcla con un tenedor hasta que se forme una masa. Amasa durante unos 10 minutos hasta que esté suave y elástica. Cubre con un paño y deja reposar durante 30 minutos.
2. Preparar el relleno: En una sartén, calienta un poco de aceite de oliva y añade el ajo. Sofríe por un par de minutos, luego agrega las setas y cocina hasta que estén doradas. Mezcla las setas con la quinua cocida, el cebollín, sal y pimienta. Deja enfriar.
3. Formar los ravioles: Divide la masa en dos partes y estira cada una con un rodillo hasta que esté muy fina. Corta la masa en círculos de aproximadamente 10 cm de diámetro. Coloca una cucharada del relleno en el centro de la mitad de los círculos. Humedece los bordes con agua y cubre con otro círculo de masa. Presiona los bordes para sellar bien.
4. Cocinar los ravioles: Lleva a ebullición una olla grande de agua con sal. Cocina los ravioles durante 3-4 minutos o hasta que floten. Retíralos con cuidado y escúrrelos.
5. Preparar la salsa de trufas: En una cacerola, calienta la crema de leche a fuego medio. Añade el aceite de trufa y sazona con sal y pimienta. Cocina unos minutos hasta que espese un poco.
6. Emplatar: Sirve los ravioles en un plato hondo, vierte la salsa de trufas por encima y decora con un poco de cebollín picado.

Recomendaciones:

• Asegúrate de no sobrecocinar los ravioles para que no se deshagan.
• Para un toque extra, puedes añadir unas lascas de trufa fresca al plato justo antes de servir.
• El plato se puede acompañar con un vino blanco fresco para realzar los sabores.

Este plato no solo es un deleite para el paladar, sino que también es una hermosa representación de la fusión de culturas culinarias. ¡Disfruta de este viaje gastronómico desde la comodidad de tu hogar!